Llega la temporada de calor extremo y también de cuidados. Entre el sol intenso y la humedad que aplasta, el cuerpo puede perder su capacidad de regular la temperatura. Por eso, saber cómo actuar ante un golpe de calor puede prevenir desde un susto fuerte hasta una situación muy grave.
El golpe de calor ocurre cuando el cuerpo no logra enfriarse por sus mecanismos naturales, como la transpiración. Suele aparecer tras pasar muchas horas al sol, hacer ejercicio intenso en días agobiantes o estar en lugares cerrados y mal ventilados. En esas condiciones, perdemos agua y sales esenciales y la temperatura interna puede subir a 39°–40°C o más, un nivel peligroso que requiere atención inmediata.
Aunque cualquiera puede sufrirlo, hay grupos que necesitan vigilancia extra: bebés y niños menores de 5 años, personas mayores de 65, quienes tienen enfermedades crónicas (cardíacas, renales, neurológicas), niños con fiebre, diarrea, desnutrición u obesidad, y quienes tienen quemaduras solares.
Cómo reconocerlo
Atención, porque los primeros síntomas son fáciles de pasar por alto: cansancio, sudoración intensa, mareos, dolor de cabeza o náuseas.
Si el cuadro avanza, las señales se vuelven mucho más evidentes: la piel puede ponerse roja, caliente y seca; la temperatura supera los 39°; el pulso y la respiración se aceleran; aparece confusión, irritabilidad o desorientación; pueden producirse calambres y, en los casos más graves, incluso pérdida de conocimiento o convulsiones.
Cómo prevenirlo
La buena noticia: el golpe de calor se puede evitar. La medida principal es evitar el sol entre las 10 y las 16 h y reducir la actividad física en ese horario. Además:
Hidratación inteligente
• Tomá líquidos durante todo el día, sin esperar la sed.
• Elegí agua, limonadas, jugos naturales o té.
• Evitá alcohol, energizantes y bebidas muy azucaradas.
• Sumá frutas y verduras con alto contenido de agua: sandía, melón, cítricos, uvas, pepino, apio.
Ropa y protección
• Optá por ropa liviana, de algodón y colores claros.
• Usá sombrero, lentes de sol y protector solar.
Ambiente y actividad
• Buscá espacios frescos y ventilados.
• Evitá ejercicios intensos en las horas de mayor calor.
• Para bajar la temperatura corporal, mojate muñecas, nuca o poné los pies en agua fría unos minutos.
Bebés y chicos
• Aumentá la frecuencia de lactancia.
• Ofrecé agua segura varias veces al día.
• No des bebidas muy frías, calientes o azucaradas.
• Bañalos o refrescales la piel durante el día.
• Jamás los dejes dentro de un auto cerrado.
Qué hacer ante un golpe de calor
Si sospechás que alguien lo está atravesando, actuá rápido:
- Trasladalo a un lugar fresco y con sombra.
- Aflojale la ropa.
- Refrescá su cabeza y cuerpo con agua.
- Ofrecele agua en pequeños sorbos, si está consciente.
- Mantené su cabeza elevada.
Lo que nunca hay que hacer es darle alcohol o bebidas azucaradas, dejarlo solo o aplicarle hielo directo en todo el cuerpo.
Evaluá llamar al servicio de emergencias, sobre todo si hay confusión, fiebre muy alta o pérdida de conocimiento.
Fuentes: Cruz Roja; Argentina.gob.ar, Greenpeace.




